The Age of Heroes es una expansion igual de interesante que los dos anteriores libros ¿Recuerdan que les dije que había un demonio por ahí que lavaba las mentes de medio mundo? Bueno, resulta que este forma parte de una profecía que traerá el fin del mundo. En otras palabras, esos nacidos de la bruma siempre fueron un peligro pues de ellos vendrá el anti-cristo.
El resto del libro se los puedo resumir en Vin, Elend y compañía manteniendo el poco orden que queda con la bruma habiéndose vuelto loca, cobrando conciencia de repente y atacando cada ápice de civilización que se encuentra. Aquí tenemos el mayor contraste con los anteriores libros; ahora sólo existen dos facciones en lugar de todos los generales y sectores gubernamentales que se repartían tajos del imperio en The Well of Ascension, o los rebeldes, criminales, nobles en constante duelo y el gobierno de The Last Empire.
El daño se multiplica con cada misterio planteado desde la partida en el primer libro, tal como el origen de los koloss o la conexión entre el demonio y la bruma, respondiéndose de manera consecutiva. Por supuesto no por medio de acciones sino por diálogos. Oye Sanderson, para eso usas flashbacks. Un tercio del libro puede irse en esto, párrafos enteros de ver como todo se resuelve en una línea recta de explicaciones.
No es como que se olviden de los combates que introducen más poderes, pero ya para este punto es estúpido. Es interesante a un nivel mecánico, pero como nunca fueron vitales hasta este punto se sienten como retcons y asspulls que Vin necesita para salvar el día de las creaturas de la bruma; sencillamente un despropósito. Eso renderiza cada intento de visión ideológica y política a un mar de paja sin punto. La historia pudo resolverse desde el día uno de estar todo esto presente.
Por supuesto que hay más desarrollo de personaje. La cosa es que no importa. Vin no necesita hacer un gran esfuerzo en ganar lo que sea que se proponga. Aquellos personajes menos poderosos están ahí desarrollándose a la par con tensión incluida, pero como no son los protagonistas y no hacen actos impactantes en la trama, se vuelve una perdida.
El punto de no retorno viene con la explicación de por qué el demonio hace lo que hace y en extensión explica el origen de la alomancia junto a su análisis desde una perspectiva filosófica. No me gustó esto, todo lo puedo resumir en una dualidad que puedes ver repetida una y otra vez en ficción, que ni fue introducido de forma apropiada como para dar un cuerno. La alomancia no tiene valor filosófico alguno, no aprendes nada de ella salvo un valor de causa y efecto. Tampoco la manejas de forma tal que afecte el cotidianidad de los usuarios. Es un super poder usado para conquistar a los demás. Es como intentar buscarle lo filosófico al Nen, no puedes fuera de que cada habilidad está relacionada con la mente del personaje, sacándole la quinta pata al gato. Si vas a hacerlo, proponte a que tenga una filosofía que esté presente de inicio a fin aplicando sus principios. Fullmetal Alchemist tenía el intercambio equivalente que regía hasta los civiles, los elementos afectaban el desarrollo de las cuatro naciones de Avatar, y hasta algo como la fuerza influenciaba en los Jedis a seguir una serie de patrones que regían sus costumbres. No puedo decir lo mismo de los alomanceros que viven vidas no influenciadas por sus poderes sino por las circunstancias socioculturales nacidas de la guerra.
Para cuando terminas te das cuenta de cómo de desconectado está todo frente al primer libro. Todos se alían para derrotar a la ruina (así se llama el demonio) apoyando a preservación (el aura Mazda de la saga por así plantearlo). Como dije se vuelve una dualidad, parecida a la de las mitologías indoeuropeas de orden y caos. Si eso es lo que era la trama entonces no debieron perder el tiempo en guerras masivas y apartheid todos debían rendirle culto a preservación, eran iguales desde un inicio, incluidos los nobles y skaa.
Pero de nuevo, a Sanderson no le importó. Le dejaré como mediocre sólo por la subversión del principio, así como por lo menos explicarme su mundo sin dejar un cabo suelto. La verdad es que la trilogía en general sería mejor condensada en un solo libro, con los poderes afectando a las facciones que componen el setting en lugar de escalar sin mucha coherencia. También sería bueno que haya un control en el sistema de magia, el mayor error del autor he de recalcar. La historia está plagada de inconsistencias nacidas de los poderes. Es casi como si todo este tiempo estuve leyendo unos libros para una sesión de D&D en vez de una novela de verdad, cosa que es en parte cierta habiendo un juego de mesa de Mistborn. Entiendo también que esto es parte del COSMERE donde The Stormlight Archives está metido, lo que explica el cambio siendo que ahora forma parte de un universo expandido. Aunque siendo sinceros ¿Eso que dice de la integridad literaria de ya saben quien? El sujeto convirtió su libro en Skyrim, un videojuego con poderes con los que puedes entrar en combates con jefes cada vez más rotos. Sorry, yo vengo a leer una novela que se me promovió como sucesora de The Lord of The Rings, no a jugar Forgotten Realms. Por eso la saga es un desperdicio en general.